Los vientos del cambio siguen soplando en el mundo del reciclaje, y van de la mano con la ingeniería y el diseño industrial para darle nuevos usos al plástico. 

La innovación juega un papel fundamental.

Cada vez es más común que surjan productos atractivos y útiles derivados del reciclaje y que se van integrando a diferentes mundos de la industria. 

En la construcción por ejemplo, actualmente se están buscando maneras de producir e implementar ladrillos hechos de plástico para las construcciones.

También en la industria del vestir ya se fabrican tenis por ejemplo y se prevé que en unos años las nuevas telas podrán ser de plástico reciclado.

Actualmente India tiene a prueba carreteras hechas de este material. 

Desde el 2018, el doctor en química, Rajagopalan Vasudevan, ideó una manera de transformar la basura de plástico común en un sustituto parcial del betún en el asfalto, utilizando no sólo plásticos y desechables como acrílicos gruesos y botellas, sino también bolsas de basura y envolturas. 

La Junta Central de Control de la Contaminación y el Congreso de Caminos de la India, dos órganos principales del gobierno, han respaldado el método.

Actualmente se han cubierto más de 20 mil kilómetros de carreteras, y los especialistas prevén que podrían conseguir la eliminación de estos desperdicios casi en su totalidad mediante el método de Vasudevan.

Pero ahí no acaba la cosa, pues el proceso se ha replicado en otros países, incluido México, que en el 2019 aplicó la sustancia de manera parcial en la carretera que va de Irapuato–La Piedad–Cuerámaro, localidades del estado de Guanajuato.

Dow México, empresa que combina química, biología y física en productos innovadores para el progreso de la humanidad, utilizó casi una tonelada de plástico post consumo, lo equivalente a 250 mil empaques flexibles de plástico para el proyecto, aportando con esto el alargar la vida útil de las carreteras y, sobre todo, la incorporación del plástico en una economía circular.

De esta forma se comienza a incorporar el plástico de manera efectiva en el ámbito del urbanismo, contribuyendo con el crecimiento económico de nuestro país. 

LA RE-CICLOVÍA

Pero por buenas noticias no paramos, ya que, por otro lado, en CDMX, la Secretaría del medio ambiente, aliada con la empresa holandesa PlasticRoad, emprendió un proyecto en el Bosque de Chapultepec, con el reto de hacer una ciudad más amigable y habitable.

Se trata de una ciclovía (ya en funcionamiento) con una superficie inteligente que se adapta a distintas condiciones del clima, diseñada especialmente para absorber agua cuando hay lluvias torrenciales, pues cuenta con sensores que monitorean el clima que reducen la posibilidad de encharcamientos, las necesidades de mantenimiento  y permite aprovechar agua que se desperdicia.

Ahora, los ciclistas capitalinos pueden andar seguros, pues ya no se preocupan por esquivar charcos o de caer en baches que a veces hay con el desgaste natural del asfalto.

Es el primer proyecto así en el mundo y el primero en América Latina, y con él se abren nuevas posibilidades para un futuro más limpio y ecológico.

La Secretaria del Medio Ambiente en CDMX, Marina Robles, destaca que es una iniciativa que combina movilidad sustentable con el reciclaje de plástico que construyen nueva infraestructura para la capital mexicana.

Éstas son tan solo algunas de las nuevas tendencias y realidades del reciclaje del plástico aplicadas de manera óptima en nuestro País, en las que tanto el gobierno como el personal de La Nacional ponemos especial atención, siempre cuidando un mundo digno de heredar a generaciones futuras.

Porque en La Nacional hacemos pequeñas acciones para lograr cambios gigantes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *